EL MERCADO DE LOS MIÉRCOLES

Fecha de publicación: Jan 28, 2015 5:59:41 PM

El pasado 7 de julio de 2014 se cumplieron 94 años desde que el tradicional mercado de Zalla se comenzó a celebrar en miércoles, pero varias actas de sesión del Ayuntamiento nos indican que el mercado existía anteriormente. Ya en sesión del Ayuntamiento del 7 de febrero de 1875 se trató la conveniencia para el vecindario de "establecer un mercado general", acordando "fijarlo los últimos Domingos de cada mes".

Una semana después matizan dónde situarlo: "en el centro o campo de la Iglesia", con la obligación de que todos los vecinos se presenten a las diez de la mañana y permanezcan hasta las tres de la tarde con su pareja de bueyes si los tiene; o vacas, novillas, algún cerdo, ganado caballar o asnal de cuadra; si careciera de todo, tendría que traer "cualquier clase de grano en cantidad

de tres celemines".

Por último, se advierte que de no presentarse se impondría una multa de 10 reales destinada a la reparación de caminos. Así se vino celebrando durante años, pero tras su desaparición, los habitantes de Zalla se desplazaban al mercado de los miércoles y sábados de Balmaseda, punto estratégico de entrada y salida de productos entre Castilla y Bizkaia.

Grupo de aldeanas que venían en tren al mercado

Tras varios años de inactividad, a partir de 1917 y con el apoyo de la Diputación Foral de Bizkaia se retomó la idea de crear un mercado semanal, que se terminó estableciendo tres años después. El Ayuntamiento intentó dar comodidades para surtir con los productos necesarios a una población en aumento debido a la actividad fabril y "en forma tal que lo consigan a la vez con la mayor economía", de manera que se consumiesen primero productos de la localidad. Del mismo modo, se atraería a forasteros, debido a las buenas comunicaciones existentes tanto por carretera como por ferrocarril, lo que redundaría en el beneficio del vecindario y en el de los intereses municipales.

La carencia de un local cubierto para la temporada de invierno y los días de lluvia se vio solventada con la cesión del pórtico por parte del párroco de la Iglesia de San Miguel.

A fin de potenciar dicho mercado semanal, al principio se obsequiaba con premios a los que concurrían con sus productos. Se consideró además que el día más apropiado era el miércoles, al objeto de no perjudicar a Balmaseda, que había reducido al sábado como único día de mercado semanal y así dar tiempo a los concurrentes para que se repusieran de los productos vendibles.

El ayuntamiento insertó anuncios en la prensa de Bilbao y distribuyó unos "repartibles" por los pueblos limítrofes,

informando de la creación de dicho mercado: "el ayuntamiento ha acordado el establecimiento de un mercado semanal de compraventa de toda clase de comestibles y aves, a semejanza de los que tienen lugar en otros puntos" (Bilbao, Durango, Orduña, Markina, Balmaseda y Mungia). También se animó al vecindario a que participara: "¡Pueblo de Zalla, haced por el triunfo del mercado!" para que esta idea llegue a "feliz término". Anunciando como valor cívico el concurrir al mismo y señalando su inauguración "el primer miércoles del próximo mes de julio",

7 de julio de 1920.

* La idea de hacer el mercado cubierto se deja patente en dos construcciones con doble proyección de uso: Las escuelas de El Corrillo, construidas hacia 1922, en cuyos soportales se hacían los mercados en día de mal tiempo e incluso los bailes públicos y el "MercadoFrontón" de Mimetiz, inaugurado en 1963. Ambos ya desaparecidos.

* El Ayuntamiento hace una petición a la Cia del Ferrocarril de la Robla para que haya un tren especial los miércoles de mercado. El 11 de septiembre de 1920 CFR contesta negativamente aduciendo sobrecarga de trabajo de personal y gasto económico añadido. Posteriormente llegaron a un acuerdo favorable.

* En 1956 se contempló la necesidad de construir una Plaza de Abastos en Zalla en línea de consolidar un mercado diario (en el que se incluirían hasta pescaderías). Proyecto que no llegó a realizarse.