DOMINGO DE ACASSUSO Y TERREROS

Fecha de publicación: Jun 15, 2017 6:41:38 AM

Nacido en Angostura del Concejo de Zalla en 1658. Fueron sus padres Domingo de Acassuso Ortiz de Sollano y María de Terreros Baluga, casados el 15 de agosto de 1639 en la parroquia de Nuestra Señora de la Peña de la Herrera.

Alistado como soldado de tropa de la Corona, es enviado el 10 de octubre de 1680 rumbo a las tierras americanas del Río de La Plata como refuerzo del Presidio de Buenos Aires, en previsión de hostilidades con el reino de Portugal.

El escribiente que le registra en el libro correspondiente lo anota como "Domingo Cazuzzo" o así lo entendió el funcionario. La filiación completa constará en un libro encuadernado en pergamino cuando se practica la revista del 21 de febrero de 1681, en la que literalmente aparece: "Domingo Cazuzzo.H.del miso.nl.Consejo de Zalla, en el Señorío de Vizcaya, medo, algs. oyos de virus en la nariz,22id," (lo que podría entenderse como: Domingo de Acassuso, hijo de otro Domingo de Acassuso, natural del Concejo de Zalla, en el Señorío de Vizcaya, mediano (de estatura), algunos hoyos de viruela en la nariz, 22 años, soldado").

En 1694 aparece ya como alférez de milicias e inicia la aventura de los negocios fletando ganado para la gobernación de Tucumán; después continuará otras operaciones comerciales: importación y venta de esclavos y esclavas negros, exportación de cueros, negociante con los ingleses, proveedor de mercaderías para el ejército, prestamista de dineros, operaciones de contrabando; así como compraventa

de estancias y tierras. 

En 1705, a los 47 años, disponía de un caudal acumulado por el que se le podía considerar uno de los más prósperos y ricos vecinos de Buenos Aires. Con esta edad entiende oportuno ocuparse de "la salvación de su alma" y por ello funda en la Parroquia de la Herrera dos capellanías (a modo de fundaciones cuyos bienes estarán dedicados a misas y obras pías); aporta la contribución de un censo de 2.100 pesos e instaura una de ellas en la ermita de San Isidro de Zokita.

En 1706 compra tierras en el Pago de la Costa o Pago de Monte Grande, y erige una ermita-capilla dedicada al Señor San Isidro Labrador, en recuerdo de la devoción heredada de sus mayores hacia este Santo que se daba en su pueblo natal y barrio de Zokita; el 10 de octubre de ese mismo año funda en esa capilla de "Monte Grande" la tercera capellanía de misas por su alma. 

En 1726 decide la construcción de una iglesia dedicada a San Nicolás de Bari y antes de concluirla le sorprende la muerte; siendo su yerno D. Francisco de Araujo quién concluyo la obra.

La ermita de Pago Grande fue varias veces modificada, pasando a aumentar de tamaño, dándose el hecho de que en su contorno se irá formando un pequeño pueblo que con el paso de los años se constituirá en una importante urbe: La Ciudad de San Isidro cabecera del partido del mismo nombre de la provincia de Buenos Aires argentino.

Cabe reseñar que con la denominación Domingo de Acasusso, existe una calle, una estación ferroviaria, un aeródromo y un club de fútbol, perpetuando su memoria en esta ciudad que cuenta con unos 50.000 habitantes en la actualidad.